Palacio de los Capitanes Generales

por Antigua Guatemala

Monumentos

Santa Clara

 

El Convento de Santa Clara, una joya histórica de la Antigua Guatemala, tiene una historia rica y fascinante que se remonta a su fundación en 1699. En ese tiempo, ya existían tres conventos de monjas en la Ciudad de Santiago, pero la generosidad de una viuda y las espléndidas ofrendas de algunos vecinos permitieron la creación de este santuario y convento.

Fundación y Desarrollo Inicial:

La historia de Santa Clara comenzó cuando un grupo de religiosas de la Concepción en Puebla, México, llegó a Santiago en 1699. Su objetivo era establecer un monasterio agregado debido al crecimiento de la comunidad religiosa en el primer monasterio de monjas en la ciudad, conocido como La Concepción. Inicialmente, solo cuatro religiosas se establecieron aquí, pero para 1631, su número había aumentado a cincuenta y dos. A medida que se construía el claustro, ubicado a dos cuadras de la Plaza Mayor y en una de las calles más importantes de la ciudad, también se sumaban nuevas novicias.

Desafíos y Reconstrucción:

En 1717, un devastador terremoto golpeó la ciudad y causó graves daños al techo de tejas del convento. Mientras se realizaban las labores de restauración, las religiosas se mudaron temporalmente a Comalapa. Sin embargo, los terremotos también afectaron sus ingresos tributarios habituales, lo que retrasó aún más el proceso de restauración. Finalmente, el 11 de agosto de 1734, se abrieron las puertas de la iglesia y el convento, que fueron edificados bajo la supervisión del Arquitecto Mayor de la Ciudad, Diego de Porres.

Arquitectura y Vida en el Convento:

El convento era de dos niveles y contaba con pasillos, habitaciones para albergar a cuarenta y seis monjas, espacios de trabajo, una clínica, comedor y una zona de servicio con horno. La iglesia, con su impresionante fachada, tenía una de las portadas más exquisitas de la ciudad. Sin embargo, durante las modificaciones, se obstruyó la entrada principal para dar lugar al coro bajo y a las bóvedas de entierro conectadas al claustro. Lamentablemente, la hermosa portada original con imágenes de arcángeles y santos en estuco se perdió con el tiempo.

De la Prosperidad a la Ruina:

A pesar de los estragos causados por los terremotos de 1773, las ruinas de Santa Clara alojaron a algunas familias durante el siglo XIX. La cúpula del templo, posiblemente ya dañada, sufrió su colapso en 1874, cuando otro terremoto sacudió la zona.

Conservación y Monumento Nacional:

En 1944, cuando la capital fue declarada Monumento Nacional, el Gobierno de Guatemala tomó medidas para preservar este importante sitio histórico. Se aisló la maquinaria agrícola que había sido sembrada en el interior y se preparó el monumento para ser visitado por el público.

Restauración y Visita Actual:

El Centro Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural (CNPAG), bajo la dirección del Arquitecto Rodolfo Asturias Méndez, llevó a cabo trabajos significativos de consolidación después de los terremotos y daños sufridos en 1976. En la actualidad, el Convento de Santa Clara es uno de los lugares más visitados de la Antigua Guatemala debido a su impresionante fachada, su apariencia en ruinas que añade un encanto especial, su hermoso jardín y las vistas panorámicas del majestuoso Volcán de Agua que ofrece a los visitantes. Este sitio histórico es un testimonio vivo de la rica herencia colonial de la ciudad y una parada obligatoria para quienes desean explorar su fascinante historia. Además, la acústica especial de la sacristía que produce eco es una característica única que agrega un toque especial a la experiencia de los visitantes. Santa Clara, con su mezcla de historia, arquitectura y belleza natural, es un lugar donde el pasado y el presente se entrelazan de manera única.

Convento de Santa Clara